Si usted tiene un diente o una muela seriamente dañada, con caries profunda o una infeccion dental, lo más recomendable es realizar un tratamiento de endodoncia. Las endodoncias tienen como objetivo salvar su diente o muela en vez de extraerla.
La pulpa es el tejido blando que contiene nervios, vasos sanguíneos y que provee nutrición a los dientes. Se puede infectar si usted tiene:
- Una caries profunda.
- Repetidas intervenciones que afectan o alteran este tejido.
- Un diente fracturado o agrietado.
- Una lesión.
Si se deja sin tratar, los tejidos que hay alrededor de la raíz del diente pueden infectarse. Si esto ocurre, probablemente sentirá dolor e inflamación y podría formarse un absceso en el hueso alrededor de las raíces del diente en cuestión. Una infección puede poner en riesgo su diente y causar la pérdida de éste.
Procedimiento endodóntico:
- Realizar un acceso a través del diente hasta llegar al nervio o pulpa dental.
- Localizar los conductos radiculares para retirar el nervio del interior de estos.
- Limpiar y desinfectar los conductos radiculares (de ser necesario, colocar medicamento dentro de los conductos).
- Rellenar los conductos radiculares para sellarlos.
- Colocar una restauración provisional hasta la restauración definitiva.
Después del tratamiento de endodoncia es necesario colocar un poste intrarradicular o núcleo y posteriormente una restauración definitiva.
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